jueves, 18 de noviembre de 2010

Dust in the wind.


Cuando no quede más que el hueso desnudo sobre la tierra tibia.

Cuando la capacidad de pensar quede reducida a polvo en una senil disputa por respirar.

Cuando comerciemos con la razón, al servicio del lenguaje del dolor y la onomatopeya vacía.

Cuando el apocalipsis sobrevenga, cuando al fin venga a nosotros el imperceptible silencio.

Yo seguiré a tu lado, trazando al rojo vivo nuestras vidas sobre una sola frontera vertical.

Dejaré que sean mis brazos calcinados los que te abracen, tu espalda contra mi alma, y mil años más no podrán tocar nuestras manos.


Cien siglos de luz no cerrarán tus pupilas. La insoportable cicatriz glaciar no vendrá a desgarrar tu piel, no podrá helar tu sangre. Serás un presente continuo, el tiempo ya no sabrá a qué atenerse.


Estaré sobre tí, no podrás evitarme. Estaré junto a tí, para tí, por tí, siempre por tí, a costa de mi vida y de la Vida.


Seré Sola. Seré yo conmigo. Seré soledad conjunta. Antonomasia por excelencia. Detenida ráfaga de austeridad narcisista. Eternamente nada. Combustión espontánea.

Seré tu todo.


Amor, algún día lo seré todo.




''Nobody said it was easy... no one ever said it would be so hard.''

(8)----------> The scientist - Coldplay.

2 comentarios:

Vamos, escúpelo.