Monotematizando.

Me gustaría derramarme.

Destrozar todas esas telas invisibles que me tapan el corazón y que me nublan la vista.

Romperme, arañar la carne, desnudar el hueso gris y hueco.

Vaciarme.

Degradarme amando con un corazón que ame.





Encontrar que siento, que al fin y al cabo tengo tu dedo en mi llaga y que duele.
Darte una buena razón para odiarme y conseguir olvidarte.




Descubrir que me arrastro por el suelo sin ser del todo consciente de ello, reconocerme en la cáscara que me cubre.



Porque, maldita sea, tiene que haber algo en mí que valga la pena. Algo que no sea este interminable silencio.




¿Cuándo empecé a terminar? Me estoy muriendo debajo de la piel.


Soy una broma patética. Lo cierto es que tengo gracia.

Lo siento.
Lo siento tanto...

Hoy, y quizás también mañana.

No se me ocurrió una manera mejor para tenerte conmigo que estrecharte, ahogar esa delgada línea que cubría los pasos entre los dos, en un furioso gesto de impaciencia y silencio.

Y te rompí en mil pedazos.


No supe aguantar tu vacío en mis brazos.


Pregunté, escribí preguntas extrañas que no venían a cuento. Taché una y mil veces todo lo que nadie podía responderme.



Grité.




Pensando que si gritaba, volverías.

Haciéndome creer que era capaz, que cualquier razón era inútil, que a pesar de todo, valía la pena gritar.


Claro que valió la pena.



Volviste y me diste la vida.


(8)-------> Sway - The Kooks