Wow!

¿Es verdad?


¿Realmente ha pasado todo esto?

Me impresionas. Has jugado fuerte. Has dado conmigo desde tu rinconcito oscuro mientras yo miraba hacia la pared como una idiota.

Todo lo que has dicho de mí...

... incluso parecería que me conoces mejor que yo misma.

Cualquiera diría que hemos hablado lo suficiente como para conocernos.
Cualquiera diría que he sido yo quien ha escrito palabrería barata para hacer daño sin concesión.

Cualquiera sería capaz de asegurar que me ha visto otearte día a día como un perro de caza. Que he sido yo quien te ha buscado las cosquillas sin motivo alguno.

Aplastando tus huesos entre mi personalidad... ¿cuál era la palabra? cínica, cínica, cínica y rastrera, asesina vulgar. Por que era ése tu objetivo: pintarme como un virus, como un tumor maligno que lo desmembra todo a su paso.

Sin embargo cometiste un error.

En tu plan de vida perfecto, un carpe diem digno de admiración, dejaste un hueco:


Te creíste el motivo.

Pensaste que TÚ eras el centro, o al menos uno de ellos.

Te has equivocado.



Sólo estorbabas en medio.

Nunca estuviste en mis planes.


No sé cómo dejé que jugases conmigo... será que estoy tan tristemente loca y bipolar que el aburrimiento me pide a gritos un poquito de sufrimiento.





Buen teatro.

Fantástica caza, pajarito.



Me has ayudado, quizás ahora deje de ser una niñata de dieciocho años.


Por si te quedase alguna duda... sí, escribo esto con la intención de que algún día lo leas por casualidad, con la seguridad de que te henchirás orgullosa en tu fantástico pedestal de hielo de que una chalada te siga el juego, impasible, pensando que has sido tú el motivo de mi desesperada esperanza, creyéndote sabia, compensándolo a los ojos emocionados de los mortales con un fatídico ''La dura experiencia me ha hecho así''.

Podrás mostrarle a todos lo retorcida que soy.
Ríete.
Respondo como una adolescente porque, aunque te empeñes en decir lo contrario, me lo has estado pidiendo a gritos.

Hiciste que todo cambiase de la noche a la madrugada. Qué shakesperiano, qué romántico.



No queda duda de que eres todo cortesía, respeto, madurez y sentimiento.





Me queda lo mejor de todo esto, créeme.

Nunca supiste cómo soy, no sabes quién soy y jamás llegarás a saberlo.

Siempre puede florecer entre la mierda ;)









PD: lo olvidaba........ bueno el truco de los comentarios ofensivos, desternillante.





Adeu!